La era de la cuarta revolución industrial que vivimos está marcada por una forma más inteligente de consumir. La economía es ahora circular. Reducir, reutilizar y repensar son los principios básicos que hay que aplicar para que sobreviva el planeta pero también como modelo de negocio. La sostenibilidad, la tecnología y las personas son las piedras angulares de este concepto circular, que se aplica a todos los sectores y a todas las áreas de la empresa.

En el campo del marketing digital, la experiencia del cliente centrará cada vez más los esfuerzos. Este concepto, clave para fidelizar, abarca desde encontrar la empresa en Facebook a la atención en el punto de venta. Las innovaciones tecnológicas que se van a implementar para profundizar en esta dirección son:

• Los chatbots, el canal de atención al cliente con más futuro: Según un estudio realizado por Facebook, el 56 por ciento de los consumidores prefieren hacer una consulta a través del chat en lugar de por teléfono. A medida que esta tendencia continúa creciendo, aumentará la necesidad de redireccionar las respuestas en los canales sociales a los departamentos de atención al cliente o al equipo de ventas.
• Inteligencia artificial: El secreto detrás de los chatbots es su capacidad de aprovechar la inteligencia artificial (IA) para ampliar su conocimiento y capacidad para proporcionar soporte de ventas y servicio de manera transparente. La IA ya se utiliza en marketing, por ejemplo en los anuncios que aparecen en las búsquedas y en las redes sociales, pero se prevé que su uso aumente un 53% en los próximos años.
• Realidad aumentada: en 2009 se aplicaron las primeras funciones de realidad aumentada a apps para teléfonos, pero no consiguió atraer a los consumidores. Sin embargo, el éxito de Pokémon go puede haber ayudado a la resurrección de esta tecnología, que ha vuelto a llamar la atención del marketing, con grandes posibilidades en decoración (Ikea Place), inmobiliarias, banners digitales o todo tipo de negocios con sede física (Google My Business).

Foto de Samuel Zeller